Historia del teleproceso
Historia del teleproceso y su evolucion
La evolución del teleproceso ha dependido en su mayor parte al desarrollo de los materiales conductores, la necesidad de la explotación del espectro radioeléctrico y el surgimiento de aparatos que permitan recibir y enviar emisiones electromagnéticas.
La evolución del teleproceso ha dependido en su mayor parte al desarrollo de los materiales conductores, la necesidad de la explotación del espectro radioeléctrico y el surgimiento de aparatos que permitan recibir y enviar emisiones electromagnéticas.
Es
por ello que para 1675, el físico irlandés Robert Boyle construyó una
bomba de vacío lo suficientemente eficiente para probar que el
magnetismo funcionaba bien tanto en el vacío como en la atmósfera.

En 1729, el inglés Stephen Gray descubrió la manera de transmitir electricidad por frotamiento de varillas de vidrio. Posteriormente, en 1745, el prusiano Ewald Von Kleist realizó experimentos para acumular electricidad; en una botella de cristal medio llena de agua y sellada con un corcho, introdujo un clavo hasta hacerlo tocar el agua, luego aproximó la cabeza del clavo a una máquina de fricción para comunicarle carga; al poner en contacto la cabeza del clavo a un cuerpo no electrificado para ver si había capturado electricidad, saltó una potente chispa que estremeció su brazo. Había descubierto que la energía se puede almacenar.
Años después, en 1753, el estadista y politólogo norteamericano Benjamin Franklin hizo descender una corriente eléctrica de una nube tormentosa, sometió a prueba el pararrayos e ideó la manera de conservar la carga eléctrica.
El francés Charles Coulomb (1736-1806), encontró en 1785 la forma de medir la electricidad y el magnetismo. Finalmente en 1795 el físico italiano Alessandro Volta consiguió producir y almacenar electricidad. Volta creyó que la electricidad procedía de los metales, por lo que construyó una pila voltaica o batería de pares de discos, uno de zinc y otro de plata, separando cada par por una piel o un disco de papel. Estos discos absorbentes que separaban los metales fueron empapados con una solución (agua salada o vinagre). Este descubrimiento aclaró que, en efecto, para almacenar energía se necesitaban dos tipos de metal y productos químicos para producir chispas.
El descubrimiento de la electricidad abrió múltiples caminos para obtener inventos más avanzados como el telégrafo en 1831, los cuales fueron transitados gracias a la perseverancia de grandes hombres de ciencia.
Posterior al desarrollo del telégrafo, surge el teléfono en 1876 y luego le siguen los satélites artificiales, redes locales, fibras ópticas, ISDN (dial up), ADSL (banda ancha), etc.
Comentarios
Publicar un comentario